24 de febrero de 2015
JULIO PORTERO / REDACCIÓN/ FOTOGRAFÍAS
La exposición de pirograbados que presenta Manuel Garrido, por su temática y rigor, refleja momentos de la vida cotidiana, haciendo un recorrido por rincones históricos de Montilla y Córdoba plasmados en madera pirograbada. La variedad de temas es una de las características de su obra, ejecutada de forma magistral y con gran profesionalidad, sumando variedad y pasión.
Manuel Garrido ha elegido para mostrar sus trabajos el espacio vivo de una típica taberna montillana como es Taberna Soldorao, enclavada en el céntrico Pasaje de la Andaluza. Este rincón donde se sirve buen vino y apreciada gastronomía ofrece un espacio idóneo al gusto del artista por el notable ambiente de artesanos que se congrega cada mediodía en este santuario donde se degusta el vino fino y el nuevo de tinaja, y se comparten animadas tertulias de una clientela culta y fiel a su cita diaria.
No será la primera vez y tampoco la última que en torno al vino y la taberna los artistas escogen estos espacios cargados de sabiduría popular para mostrar sus trabajos. La muestra estará expuesta hasta el próximo 18 de marzo.
Manuel Garrido comenzó su andadura artística como autodidacta en esta técnica que lleva años desarrollando y en la que se ha convertido en todo un experto de esta disciplina. Como pudimos ver hace apenas dos años en la exposición de artesanía de la Casa del Inca, y en fecha más reciente el pasado mes de junio en el Salón San Juan de Dios con motivo de la primera Muestra de Artesanía de Montilla. Y es que, Garrido comparte su inquietud artística con el fomento y el desarrollo de la artesanía de esta ciudad, siendo uno de los fundadores de la Asociación Cultural de Artesanos de Montilla “Solano Salido”.
La pasión por el arte y la artesanía siempre ha estado presente en la vida de Manuel Garrido, hombre de trato cercano y generosa sensibilidad que ha cultivado desde su juventud, mostrando en el ejercicio de sus primeros trabajos de dibujo a lápiz y carboncillo una depurada técnica.
Esta destreza en el dibujo le ha servido para trasladar al soporte de la tabla de madera sus elaborados pirograbados que rozan el puntillismo por la infinidad de pequeños detalles y matices que no escapan al ojo experto cuando ve uno de sus trabajos terminados. Cuadros en los puede emplear perfectamente dos meses de intenso trabajo.
Ha sido en el dibujo pirograbado en el que ha volcado su tiempo para reflejar con finos trazos de calor todo el realismo que se puede apreciar en los cuadros que expone en Taberna Soldorao. Una muestra intimista acorde a su modestia, que ha contado con el apoyo de sus amigos conocedores de los bellos trabajos que atesora en su estudio son los que le han animado a mostrar al público sus obras.
Un artesano artista que ha sabido impregnarle a esta técnica de la pirografía otra dimensión utilizando un sencillo pirograbador adaptado por él, sumándole imaginación y ganas, hasta que hace poco tiempo adquirió de segunda mano un pirograbador profesional con transformador y potenciómetro con puntas intercambiables que a buen seguro le facilitará su trabajo.
La técnica del pirograbado es básicamente un sistema de grabado aplicando calor, generalmente en madera pero que también se realiza sobre papel, cuero, etc. Según la intensidad y el tiempo del calor aplicado, el artista consigue diversas texturas y luminosidades con la punta candente sobre el material utilizado.